Guadalupe Amor, rescatada en escena

El dramaturgo Miguel Sabido pone en escena una pieza de homenaje a la poeta mexicana Guadalupe Amor (1918-2000), con una sucesión de episodios temáticos constituidos por sus versos. Pretende rescatar a una poeta que, afirma, México debe tener presente. Y además de actrices a las que dice reclamar el máximo, cuenta con la participación de Elena Poniatowska (foto), sobrina de la poeta.

Es un homenaje pero no por eso es evitada la etapa que, según las convenciones no precisamente poéticas, fue la de la decadencia de “Pita” Amor, a quien Sabido considera figura fundamental de las letras de su país.

“Cuento desde sus momentos de triunfo absoluto hasta el de la gran decadencia, cuando la llamaban el fantasma de la Zona Rosa y andaba de restaurante en restaurante, pues realmente pidiendo limosna. Escribía sonetos a cambio de comida, los borrachos se reían de ella mientras pedía limosna”, declaró el dramaturgo.

Con una única función a fines de junio en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, la pieza cuenta con las actrices Lilia Aragón, Gabriela Araujo, Graciela Doring, Blanca Guerra y Pilar Pellicer, a quienes Sabido dirige con gran exigencia, como dijo a periodistas mexicanos, en las lecturas dramatizadas de los versos.

La primera parte de la puesta es llamada “Autorretrato”. Amor “se escribió una gran cantidad de poesía para ella misma, era de una vanidad e insolencia maravillosa. Ella se celebraba y se cantaba a sí misma”. Siguen poemas que reflejan la angustia de la escritora sobre su identidad, tomados de “Yo soy mi casa”, su único libro editado, y luego los que se refieren a la muerte. Después continúan versos eróticos y, en la parte final, la “poesía mística”, la interpelación a Dios.

Poniatowska, por su parte, hace aportaciones sobre la vida de su tía y su familia.

Según Sabido, Amor “perteneció a una clase cultural notable, que se dio en un momento especial de la cultura mexicana. Es importante recuperar a esas figuras”. (23.06.2012).