El autor publica “El tumulto del sueño”, que remite –dice- a un “condimento literario para crear una atmósfera más ambigua”.
Abelardo Sánchez León nació en Lima, en 1947, y a propósito de este libro y las referencias que contiene respecto del paso del tiempo, propuso afrontar “con humildad” la posibilidad de que el oficio del poeta sea “el oficio de la posteridad”.
Dijo: “Que tengas la suerte que te sigan leyendo después de un tiempo, otras generaciones, puede ser. Cuando yo reviso mi biblioteca, las veces que la reviso, me digo: cuántas voces ya no se oyen para nada. El destino es la desaparición. Yo escribo para el presente, no para una posteridad. En todo caso, la darán otras personas, no uno. Y mientras menos piense en eso, mejor”.
Sánchez León publicó su primer libro de poesía en 1969, “Poemas y ventanas cerradas”. Es autor de antologías sobre la poesía peruana, novelista, ensayista y autor de libros de crónicas. Además de reconocimientos en su país, obtuvo la beca Guggenheim, en 1980, y la Fulbright, en 1989.
“El tumulto del sueño” fue publicado en la colección Alma Matinal, Serie de Poesía Contemporánea de Editorial Peisa, que en su espacio oficial expresa que en el libro Sánchez León expone “pasajes de una existencia rica en experiencias”, “un torrente de vivencias que nos hablan de plenitud e intensidad”.
En diálogo con La República, el poeta explicó que concibe al sueño como “un velo”. El título, agregó, viene de Eugenio Montale (Génova, 1896-Milán, 1981), quien “habla también de un velo con el que da una mirada más indulgente al tumulto del sueño”.
Ante una pregunta del diario, dijo: “Yo creo que la poesía debe ser reflexiva. Creo que la poesía como un retrato fotográfico de la realidad puede ser una cosa más superficial. Yo creo que siempre la realidad merece una reflexión, una vuelta de tuerca, qué hay detrás”.
Acerca de la presencia del tema del paso del tiempo, Sánchez León la consideró “inevitable” y más ahora, con la pandemia, ya que “todos hablan de lo rápido que ha pasado el tiempo o cuánto tiempo no nos hemos visto o cuánto han cambiado los rostros, sus hábitos. El tiempo nos moldea, como decía Borges. Estamos hechos de tiempo”.
Después de responder con una humorada a la pregunta sobre de quién depende la vigencia de un poeta (“de las reediciones”, dijo), el autor limeño sostuvo que el gran tema de la permanencia o no de la poesía es el lenguaje.
Lo explicó así: “Creo que los poemas envejecen por el lenguaje, un lenguaje de la época, que ya no se escribe. Eso decía Westphalen (Emilio Adolfo, poeta peruano, 1911-2001), que tenía un lenguaje poético tan interesante, pero también un lenguaje poético clásico. Cada poeta pertenece a su época, a su generación. Vallejo, por ejemplo. Su vigencia está por su lenguaje, Esa es la riqueza de ‘Trilce’”.
La entrevista completa, que trata otros aspectos sobre poesía, así como su narrativa, está disponible en este vínculo: https://larepublica.pe/cultural/2022/11/27/libros-abelardo-sanchez-leon-los-poemas-envejecen-por-el-lenguaje-cultura-poesia/