Recibió el Premio Internacional de Poesía Ciudad de Granada – Federico García Lorca, que anteriormente fue adjudicado a varios latinoamericanos.
Al entregarle el reconocimiento, el alcalde de Granada, Francisco Cuenca, opinó que en su obra Luis Alberto de Cuenca “hace convivir la cultura clásica con las formas estéticas de estricta contemporaneidad”.
El poeta que nació en 1950 es también filólogo, traductor y ensayista, y en su trayectoria figura su actividad como secretario de Cultura entre 2000 y 2004, durante el gobierno del derechista José María Aznar, del Partido Popular.
Este reconocimiento en Granada se suma al Premio Nacional de la Crítica por su obra “La caja de plata”, en 1985; el Internacional de Poesía Ciudad de Melilla, por “La vida en llamas”, en 2005; el Premio de Poesía Manuel Alcántara, por “Paseo vespertino”, en 2009; y el Nacional de Poesía por “Cuaderno de vacaciones”, en 2015, entre otros.
El Premio Internacional Ciudad de Granada – Federico García Lorca fue instituido en 2003 por el Ayuntamiento, con la finalidad de reconocer la obra de poetas que contribuyan a las letras en español.
Recayó en varias oportunidades en poetas de América Latina: Fina García Marruz, de Cuba; Eduardo Lizalde, de México; Rafael Cadenas y Yolanda Pantin, de Venezuela; Ida Vitale, de Uruguay; y Darío Jaramillo, de Colombia.
En el acto de entrega del premio, a comienzos de mayo, el alcalde sostuvo que el poeta, con este reconocimiento, pasa a ser “parte indisociable de esta ciudad eterna e imperecedera”. Así, lo invitó a aportar a “las líneas rectas (sic) del futuro de Granada, en el que la cultura sostiene el andamiaje de su proyecto de ciudad”.
La ceremonia se realizó en el Centro García Lorca, donde -recordó el alcalde- “descansa, desde 2018, la voz del poeta más universal, su imaginación y sus sueños”. Esta es una referencia a que en ese año, después de una negociación muy trabajosa, Granada consiguió quedarse con el legado del poeta y dramaturgo.
Y fue en esa intervención cuando habló de “la singularidad con la que la obra de De Cuenca hace convivir la cultura clásica con las formas estéticas de estricta contemporaneidad, un hecho que le convierte en una de las voces de referencia para la poesía del siglo XXI”.
El alcalde leyó unos versos del autor premiado, tras lo cual expresó: “Permíteme, poeta, que me suba a lomos de tus versos y revindique para Granada ese optimismo que nos hace tanta falta en tiempos oscuros y complejos”.
Ese optimismo, prosiguió, fue parte de “la tarjeta de visita de Federico García Lorca, que alcanzó la inmortalidad en la memoria de quienes tenían la fortuna de ser arrollados por su torbellino vital”.
(14.5.22)